COMO AGUA ENTRE MIS DEDOS

COMO AGUA ENTRE MIS DEDOS


Nuestra relación, no fue

lo que creímos que llegaría a ser.
Dejamos sin descorchar
la mejor botella de amor
colmada de besos y caricias.
Te escapaste como la lluvia
resbala entre mis dedos,
y tu maleta sin deshacer
cargada de sueños
se quedó tras la puerta.
No me dio tiempo
a hacerte un hueco en mi armario,
poner tu nombre en el buzón
o dejar mi huella en tu piel.
Y tú, tampoco llegaste
a dejar tu olor en mi hombro
ni la mancha de carmín
en mi taza de desayuno.
Fuimos un amor de transición
en ese esperar a nuestra alma gemela,
una terapia en la reconstrucción
de nuestro raído corazón.
Solo alcanzaste a ser
mi amor eterno más breve.

Antonio Rodríguez Álamo
Septiembre 2014